El comienzo del conflicto armado
Cuando se proclama la independencia de Israel, el 14 de mayo de 1948, las potencias occidentales se apresuraron a reconocerla. Los representantes de los árabes palestinos, rechazaronn la creación de un Estado Palestino, atribuyendo esta decisión a la negativa de reconocer al Estado de Israel. Con el fin de erradicar a los judíos y al Estado judío, los estados árabes forman una coalición integrada por: Líbano, Siria, Jordania, Iraq y Egipto y declaran la guerra al Estado de Israel. Israel termina ganando el enfrentamiento. Pero comete uno de los primeros errores diplomáticos, extiende su territorio en represalia. Si bien lo hace dentro del límite de Palestina, y lo hace sobre territorio "libre" ya que no había aceptado la condición de Estado, estos terrenos para la ONU seguían estando en disputa, por lo tanto, no consiguió la aprobación. Se crea la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) con la esperanza de un retorno inmediato si bien las expulsiones de palestinos por el ejército israelí continuaron durante la década de los 50.
Del nacimiento del Estado de Israel a la Masacre de Munich
En 1896, Teodoro Herlz, padre del sionismo político, había escrito “El estado judío”, donde expuso que el antisemitismo sólo se resolvería con la creación de un estado hebreo. En 1917 Gran Bretaña se comprometió a través de la Declaración de Balfour a colaboración de crear un “hogar” nacional para los judíos en Palestina, territorio que había quedado en poder de los británicos como Mandato de la Sociedad de Naciones al término de la Primera Guerra Mundial.
A partir de la década del ’20 se conforma el Consejo Nacional Judío que comienza a presionar a los británicos para que cumplan su promesa al tiempo que promueve la radicación de colonos de religión judía en Palestina. Irónicamente fue la genocida política racial de Hitler la que pondría en marcha este plan recién a mediados de los años ’30. Es que antes de la llegada del nazismo al poder, la idea de regresar a la Tierra Prometida no había sido especialmente popular entre los judíos europeos.
Paralelamente británicos y franceses habían creado naciones árabes con élites adictas, de manera de poder controlar el acceso al petróleo y de evitar que prendiera en la población la idea de “panarabismo” que circulaba por todo Medio Oriente. Al mismo tiempo, a consecuencia también de la Segunda Guerra Mundial, tomó mayor poder el lobby judío en los Estados Unidos, a través de su contribución financiera para los gastos bélicos. Y que tendrán un peso innegable en la política futura de los Estados Unidos en Medio Oriente.
Cuando las Naciones Unidas decidieron la partición de Palestina para detener la guerra civil en diciembre de 1947, los árabes palestinos se encontraron impotentes ante el hecho consumado: los judíos en Palestina eran ya 600 mil, y había otros tantos refugiados en Chipre esperando desembarcar; tenían un Consejo Nacional, un ejército y grupos de milicianos que cometían actos terroristas y de sabotaje contra las autoridades británicas; y ya habían ocupado las ciudades de Jaffa y Haifa.
El viernes 14 de mayo de 1948 la ONU decidió dar fin al Mandato británico en Palestina, ese mismo día el Consejo Nacional Judío (que ya estaba reunido secretamente) proclamó la creación del Estado de Israel y proclamó presidente a David Ben-Gurion.
Apenas se hace pública la noticia, los ejércitos de Egipto, Transjordania, Irak, Siria y Líbano invadieron el país y se desencadenó una guerra encarnizada que concluyó en enero de 1949 con la victoria de Israel y la expulsión de 800 mil palestinos de su territorio. Ningún estado árabe reconoció al Estado de Israel, y los árabes palestinos fueron incapaces de conformar una unidad nacional coherente.
Las fuerzas del Irgún, que intervinieron en la guerra, fueron responsables de numerosos ataques terroristas: la matanza cometida contra civiles árabes en la aldea de Deir Yassin, unida a otras similares en otras aldeas palestinas como Saliha, Dawayima o Abu Shusha, provocaron una oleada de pánico entre la población civil palestina y tuvieron gran importancia en el éxodo de la mayoría de la población árabe de Palestina hacia Gaza y Cisjordania o hacia otros países árabes.
Las fuerzas del Irgún, que intervinieron en la guerra, fueron responsables de numerosos ataques terroristas: la matanza cometida contra civiles árabes en la aldea de Deir Yassin, unida a otras similares en otras aldeas palestinas como Saliha, Dawayima o Abu Shusha, provocaron una oleada de pánico entre la población civil palestina y tuvieron gran importancia en el éxodo de la mayoría de la población árabe de Palestina hacia Gaza y Cisjordania o hacia otros países árabes.
Después del fracaso de 1957, Israel logró ocupar toda Palestina en 1967, en la llamada Guerra de los Seis Días en la que volvió a derrotar a una coalición de ejércitos árabes. Israel también ocupó el Sinaí egipcio y el Golán sirio, y obligó a cientos de miles de palestinos a ocupar campos de refugiados en Jordania, Siria y Líbano. Provocando inestabilidad política en esos países.
En septiembre de 1970 el ejército jordano masacró a cientos de palestinos, que habían conformado grupos de milicianos y amenazaban con tomar el poder del país.
Paralelamente, los palestinos en el exilio constituyeron la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Jerusalén Este en la primera reunión del Consejo Nacional Palestino entre el 28 de mayo y el 2 de junio de 1964. En 1967, después de la vitoria israelí en la llamada Guerra de los Seis Días, quedó bajo el mando de Yasser Arafat, quien será el principal símbolo de la resistencia palestina hasta su muerte, hace casi diez años.
Al mismo tiempo, se formaron grupos de milicianos (algunos reconocidos por la OLP), como el Al-Fatah y el Frente Popular para la Liberación de Palestina; que comenzaron con una campaña de brutales ataques terroristas contra intereses israelíes. El más tristemente célebre de estos atentados fue la masacre de los atletas de la delegación israelí en los Juegos Olímpicos de Munich ’72, perpetrada por el grupo Septiembre Negro (por la matanza de 1970 e Jordania). Israel respondió bombardeando los campos de refugiados palestinos.
Al mismo tiempo, se formaron grupos de milicianos (algunos reconocidos por la OLP), como el Al-Fatah y el Frente Popular para la Liberación de Palestina; que comenzaron con una campaña de brutales ataques terroristas contra intereses israelíes. El más tristemente célebre de estos atentados fue la masacre de los atletas de la delegación israelí en los Juegos Olímpicos de Munich ’72, perpetrada por el grupo Septiembre Negro (por la matanza de 1970 e Jordania). Israel respondió bombardeando los campos de refugiados palestinos.
Anexo Cartográfico
(Fuente de los mapas: Ministerio de Asuntos Interiores de Israel, http://www.mfa.gov.il/MFA/Facts+About+Israel/Israel+in+Maps/)
(1926-1947)
Plan de Partición de la ONU
(1947)
Israel y Palestina despúes del Armisticio de 1949
Israel después de la Guerra de los Seis Días
(1967-1973)
La Masacre de Munich
En el momento de la toma de rehenes, los Juegos Olímpicos de Múnich 1972 transcurrían en su segunda semana. El Comité Olímpico Alemán, organizador del evento, tenía como objetivo que la atmósfera de la villa olímpica fuese abierta y amistosa. Se buscaba de esta manera dejar atrás la imagen de los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, los que habían sido explotados como parte de la propaganda nazi del régimen de Adolf Hitler. El film documental "Un día en septiembre" proclamó que la seguridad de los atletas fue intencionalmente leve y que los mismos podían entrar y salir de la Villa Olímpica sin presentar ningún tipo de credenciales. Varios atletas eludieron los puntos de control en la villa y escalaban el cerco perimetral para acceder a la misma.
La ausencia de personal armado de seguridad, fue motivo de preocupación al titular de la delegación israelí, Shmuel Lalkin, desde antes de la llegada del equipo olímpico a Alemania. En entrevistas posteriores dadas a los periodistas Serge Groussard y Aron Klein, Lalkin declaró que había hablado con las autoridades alemanas sobre su intranquilidad. El equipo israelí se hospedaría en un sector relativamente aislado del resto de la villa olímpica, en un pequeño edificio cercano al portón, por lo que Lalkin entendía que los atletas se encontrarían en una situación vulnerable respecto de un asalto desde el exterior. Las autoridades alemanas aparentemente aseguraron a Lalkin que se proveería de seguridad adicional a la delegación israelí, pero Lalkin expresaría posteriormente que dudaba acerca que dichas medidas se hubieran aplicado verdaderamente.
Los organizadores del evento consultaron al especialista forense germano-occidental, Georg Sieber, para que creara veintiséis posibles escenarios de ataques terroristas y colaborase en su prevención. El "escenario 21" previsto por Sieber incluía una situación de asalto a las habitaciones de la delegación israelí por parte de comandos terroristas, quienes a su vez requerirían la provisión de un avión para abandonar Alemania. La organización se resistió a la aplicación del escenario 21, ya que iba contra la imagen de "juegos felices" que buscaban, por lo que se negaron a aumentar las medidas de seguridad.
Las consecuencias
El 5 de septiembre, la entonces primera ministra de Israel, Golda Meir instaba al resto de naciones a reprobar el bárbaro acto criminal. El ataque fue ampliamente condenado por todo el mundo, incluidos significativos personajes árabes como el rey Hussein I de Jordania.
Las autoridades alemanas encarcelaron a los tres terroristas supervivientes y crearon la unidad antiterrorista GSG9 para dar una respuesta contundente en futuras acciones de rescates de rehenes.
El 9 de septiembre, la fuerza aérea israelí bombardeó como respuesta las bases de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Siria y Líbano, ataque que fue reprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU. Asimismo, una resolución de la ONU de condena de los hechos de Munich, amparada por los Estados Unidos, fue rechazada.
El 29 de octubre, un avión de Lufthansa fue secuestrado, exigiendo los terroristas la liberación de los tres integrantes de Septiembre Negro presos en cárceles alemanas. Sus reivindicaciones fueron atendidas por las autoridades germanas.
Los hechos acaecidos en Munich traerían consigo una espiral de violencia por parte de Israel, con el fin de dar caza a los supuestos responsables del acto terrorista. Tras el ataque a la villa olímpica y la posterior liberación de estos tres terroristas, Golda Meir y el Comité de Defensa Israelí dieron órdenes secretas al Mossad (servicio secreto israelí) de matar, dondequiera que se encontrasen, a los once hombres de Septiembre Negro y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) que planificaron y organizaron la matanza de los atletas israelíes. Para ello, el servicio secreto israelí creó una unidad encubierta que sería ayudada por las células de información israelíes instaladas en Europa. Esta misión se conocería más tarde como Operación Cólera de Dios (Mivtzah Za'am Hael en hebreo).
Gracias a la información capturada a la OLP, y a la facilitada por los servicios de inteligencia europeos aliados, el Mossad elaboró una lista de objetivos encabezada por Wael 'Aadel Zwaiter, un miembro sospechoso de pertenecer a Septiembre Negro y que representaba oficialmente a la OLP en Italia, quien sería asesinado el 16 de octubre. La muerte de Zwaiter fue seguida de atentados mediante cartas bomba, que no causaron víctimas mortales, contra representantes de la OLP en Argelia y Libia, contra palestinos en Bonn (Alemania) y Copenhague (Dinamarca), y contra un representante de la Cruz Roja en Estocolmo (Suecia).
El 8 de diciembre, el representante de la OLP en París (Francia), Mohammad Hamshiri fue asesinado mediante una bomba activada por control remoto, la cual estaba instalada debajo de su escritorio. En los tres meses siguientes, cuatro integrantes de la OLP y la FPLP fueron asimismo asesinados en Chipre, Grecia y París.
El 9 de abril de 1973, Israel lanza la operación Primavera de Juventud en Beirut, (Líbano). Los objetivos eran Mohammad Yusuf al-Najjar (Abu Yusuf), Kamal Adwan y Kamal Nasser, todos ellos importantes dirigentes de la OLP. Un grupo de comandos israelíes desembarcó en una desierta playa del Líbano, dirigiéndose posteriormente a Beirut, donde acabaron con la vida de los tres palestinos, cuatro civiles libaneses, tres turistas sirios, un italiano y dejando 29 personas más heridas. A continuación, explotaron el cuartel general del FPLP en la ciudad y una fábrica de explosivos de Al Fatah.
El 28 de junio de 1973, el argelino Mohammad Boudia, encargado de las operaciones de Septiembre Negro en Europa, fue asesinado mediante un coche bomba en París.
El 21 de julio de 1973, tuvo lugar el conocido como asunto de Lillehammer. Un equipo de agentes del Mossad mató en Lillehammer (Noruega) a Ahmed Bouchiki, un marroquí sin relación alguna con los hechos acaecidos en Munich, después de que un informador del Mossad lo confundiera con Ali Hasan Salameh, integrante de Septiembre Negro. Cinco agentes del servicio secreto israelí, incluyendo dos mujeres, fueron capturados por las autoridades noruegas, siendo juzgados y encarcelados. Posteriormente serían liberados y expulsados a Israel.
El 22 de enero de 1979, el servicio secreto israelí daría finalmente con el paradero de Salameh, asesinándolo con un coche bomba.
Mohammed Daoud Oudeh alias Abu Daoud (de quien se dice que fue el que concibió la acción) murió en el Hospital Al-Andalus de Damasco (Siria), el 3 de julio de 2010 por Insuficiencia renal.
© carlitosber.blogspot.com.ar, Julio 15 MMXIV
Permitidos su copia, plagio o reproducción sin citar la fuente
La Masacre de Munich
En el momento de la toma de rehenes, los Juegos Olímpicos de Múnich 1972 transcurrían en su segunda semana. El Comité Olímpico Alemán, organizador del evento, tenía como objetivo que la atmósfera de la villa olímpica fuese abierta y amistosa. Se buscaba de esta manera dejar atrás la imagen de los Juegos Olímpicos de Berlín 1936, los que habían sido explotados como parte de la propaganda nazi del régimen de Adolf Hitler. El film documental "Un día en septiembre" proclamó que la seguridad de los atletas fue intencionalmente leve y que los mismos podían entrar y salir de la Villa Olímpica sin presentar ningún tipo de credenciales. Varios atletas eludieron los puntos de control en la villa y escalaban el cerco perimetral para acceder a la misma.
La ausencia de personal armado de seguridad, fue motivo de preocupación al titular de la delegación israelí, Shmuel Lalkin, desde antes de la llegada del equipo olímpico a Alemania. En entrevistas posteriores dadas a los periodistas Serge Groussard y Aron Klein, Lalkin declaró que había hablado con las autoridades alemanas sobre su intranquilidad. El equipo israelí se hospedaría en un sector relativamente aislado del resto de la villa olímpica, en un pequeño edificio cercano al portón, por lo que Lalkin entendía que los atletas se encontrarían en una situación vulnerable respecto de un asalto desde el exterior. Las autoridades alemanas aparentemente aseguraron a Lalkin que se proveería de seguridad adicional a la delegación israelí, pero Lalkin expresaría posteriormente que dudaba acerca que dichas medidas se hubieran aplicado verdaderamente.
Los organizadores del evento consultaron al especialista forense germano-occidental, Georg Sieber, para que creara veintiséis posibles escenarios de ataques terroristas y colaborase en su prevención. El "escenario 21" previsto por Sieber incluía una situación de asalto a las habitaciones de la delegación israelí por parte de comandos terroristas, quienes a su vez requerirían la provisión de un avión para abandonar Alemania. La organización se resistió a la aplicación del escenario 21, ya que iba contra la imagen de "juegos felices" que buscaban, por lo que se negaron a aumentar las medidas de seguridad.
Cronología del ataque terrorista:
5 DE SEPTIEMBRE
04:30: Ocho terroristas palestinos saltan la valla de seguridad de la villa olímpica vestidos con ropa deportiva y bolsos llenos de ametralladoras y granadas. Deportistas de la villa los ven saltar, pero creen que se trata de atletas regresando tras una noche de fiesta.
04:55: Los terroristas ocupan la casa del equipo olímpico israelí en la calle Connolly. Nadie vigilaba el edificio y la entrada estaba abierta.05:00: Durante la entrada de los terroristas se produce un primer tiroteo cuando el entrenador del equipo israelí de halterofilia, Moshe Weinberger, ofrece resistencia. El incidente permite huir a algunos atletas. El levantador de pesas Josef Romano resulta herido. Los atacantes retienen a otros nueve rehenes.05:08: Terroristas enmascarados entregan un ultimátum a la policía en el que exigen que libere a más de 200 presos palestinos que se encuentran en cárceles de Israel antes de las 9:00 horas.05:21: Un anónimo pide por teléfono a la Cruz Roja que se presente en la villa olímpica. Los médicos encuentran a Weinberger ya muerto y los terroristas les impiden acceder a Romano. El pesista se desangra ante la mirada impotente de sus compañeros.07:00: Uno de los enmascarados dice ser líder del grupo. Habla alemán.07:20: El ministro del Interior alemán, Hans-Dietrich Genscher, y su par de Baviera, Bruno Merk, llegan a la villa olímpica.08:00: Los terroristas se presentan como miembros de la organización palestina "Septiembre Negro". En febrero ya habían asesinado a cinco jordanos en la ciudad alemana de Colonia. Después de negociar con la policía, prolongan el ultimátum hasta las 12 horas.11:15: El embajador israelí en Alemania llega al lugar y aclara que su gobierno no liberará a los prisioneros.11:45: El ultimátum se extiende hasta las 15 horas. Policías disfrazados llevan comida al edificio con el objetivo de analizar la situación desde dentro, pero el plan fracasa porque uno de los terroristas recoge las cajas en la puerta.13:00: Nuevo retraso del ultimátum hasta las 17 horas.15:35: La organización interrumpe los Juegos Olímpicos.16:30: El ministro Genscher obtiene permiso para ingresar en el barrio israelí y mantener nuevas negociaciones. Los secuestradores exigen ahora un avión con dirección a El Cairo. El gobierno egipcio rechaza luego un posible aterrizaje en su territorio.18:30: Los terroristas piden volar junto con los rehenes hasta el aeropuerto militar en Fürstenfeldbruck. El gabinete de crisis finge aceptar la propuesta con el objetivo de asaltar a los secuestradores en el aeropuerto.22:22: Dos helicópteros con los terroristas y los rehenes despegan rumbo a Fürstenfeldbruck.22:35: Los helicópteros aterrizan. Al menos cuatro terroristas bajan y se acercan a un avión de pasajeros de Lufthansa en el que supuestamente escaparán. Adentro, dos policías disfrazados con uniformes de Lufthansa deben atacarlos, pero cancelan el plan a último momento al considerarlo demasiado peligroso. Los terroristas descubren el engaño al ver el avión vacío y vuelven a los helicópteros. Tiradores de élite de la policía abren fuego y el resto de terroristas responde con sus ametralladoras. Dos tripulantes de los helicópteros resultan heridos y un policía muere.6 DE SEPTIEMBRE00:05 horas: Un terrorista salta de uno de los helicópteros y arroja una granada dentro. El baño de sangre termina con cinco terroristas muertos y tres detenidos. Ninguno de los rehenes sobrevive.10:00: En el Estadio Olímpico se celebra un acto de homenaje a los atletas israelíes asesinados. Al día siguiente, los Juegos Olímpicos, en una de las mayores infamias del olimpismo modernos, continúan con el programa previsto.
Las consecuencias
El 5 de septiembre, la entonces primera ministra de Israel, Golda Meir instaba al resto de naciones a reprobar el bárbaro acto criminal. El ataque fue ampliamente condenado por todo el mundo, incluidos significativos personajes árabes como el rey Hussein I de Jordania.
Las autoridades alemanas encarcelaron a los tres terroristas supervivientes y crearon la unidad antiterrorista GSG9 para dar una respuesta contundente en futuras acciones de rescates de rehenes.
El 9 de septiembre, la fuerza aérea israelí bombardeó como respuesta las bases de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) en Siria y Líbano, ataque que fue reprobado por el Consejo de Seguridad de la ONU. Asimismo, una resolución de la ONU de condena de los hechos de Munich, amparada por los Estados Unidos, fue rechazada.
El 29 de octubre, un avión de Lufthansa fue secuestrado, exigiendo los terroristas la liberación de los tres integrantes de Septiembre Negro presos en cárceles alemanas. Sus reivindicaciones fueron atendidas por las autoridades germanas.
Los hechos acaecidos en Munich traerían consigo una espiral de violencia por parte de Israel, con el fin de dar caza a los supuestos responsables del acto terrorista. Tras el ataque a la villa olímpica y la posterior liberación de estos tres terroristas, Golda Meir y el Comité de Defensa Israelí dieron órdenes secretas al Mossad (servicio secreto israelí) de matar, dondequiera que se encontrasen, a los once hombres de Septiembre Negro y del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) que planificaron y organizaron la matanza de los atletas israelíes. Para ello, el servicio secreto israelí creó una unidad encubierta que sería ayudada por las células de información israelíes instaladas en Europa. Esta misión se conocería más tarde como Operación Cólera de Dios (Mivtzah Za'am Hael en hebreo).
Gracias a la información capturada a la OLP, y a la facilitada por los servicios de inteligencia europeos aliados, el Mossad elaboró una lista de objetivos encabezada por Wael 'Aadel Zwaiter, un miembro sospechoso de pertenecer a Septiembre Negro y que representaba oficialmente a la OLP en Italia, quien sería asesinado el 16 de octubre. La muerte de Zwaiter fue seguida de atentados mediante cartas bomba, que no causaron víctimas mortales, contra representantes de la OLP en Argelia y Libia, contra palestinos en Bonn (Alemania) y Copenhague (Dinamarca), y contra un representante de la Cruz Roja en Estocolmo (Suecia).
El 8 de diciembre, el representante de la OLP en París (Francia), Mohammad Hamshiri fue asesinado mediante una bomba activada por control remoto, la cual estaba instalada debajo de su escritorio. En los tres meses siguientes, cuatro integrantes de la OLP y la FPLP fueron asimismo asesinados en Chipre, Grecia y París.
El 9 de abril de 1973, Israel lanza la operación Primavera de Juventud en Beirut, (Líbano). Los objetivos eran Mohammad Yusuf al-Najjar (Abu Yusuf), Kamal Adwan y Kamal Nasser, todos ellos importantes dirigentes de la OLP. Un grupo de comandos israelíes desembarcó en una desierta playa del Líbano, dirigiéndose posteriormente a Beirut, donde acabaron con la vida de los tres palestinos, cuatro civiles libaneses, tres turistas sirios, un italiano y dejando 29 personas más heridas. A continuación, explotaron el cuartel general del FPLP en la ciudad y una fábrica de explosivos de Al Fatah.
El 28 de junio de 1973, el argelino Mohammad Boudia, encargado de las operaciones de Septiembre Negro en Europa, fue asesinado mediante un coche bomba en París.
El 21 de julio de 1973, tuvo lugar el conocido como asunto de Lillehammer. Un equipo de agentes del Mossad mató en Lillehammer (Noruega) a Ahmed Bouchiki, un marroquí sin relación alguna con los hechos acaecidos en Munich, después de que un informador del Mossad lo confundiera con Ali Hasan Salameh, integrante de Septiembre Negro. Cinco agentes del servicio secreto israelí, incluyendo dos mujeres, fueron capturados por las autoridades noruegas, siendo juzgados y encarcelados. Posteriormente serían liberados y expulsados a Israel.
El 22 de enero de 1979, el servicio secreto israelí daría finalmente con el paradero de Salameh, asesinándolo con un coche bomba.
Mohammed Daoud Oudeh alias Abu Daoud (de quien se dice que fue el que concibió la acción) murió en el Hospital Al-Andalus de Damasco (Siria), el 3 de julio de 2010 por Insuficiencia renal.
© carlitosber.blogspot.com.ar, Julio 15 MMXIV
Permitidos su copia, plagio o reproducción sin citar la fuente
No hay comentarios:
Publicar un comentario