sábado, 12 de octubre de 2013

Semana 41

Hablando de "inseguridad"

Esta semana se conoció “100”, un informe de la ONG “La Alameda” sobre los puntos de venta de droga en la Ciudad de Buenos Aires. El pasado martes 8 de octubre fue presentado ante la fiscalía general de Federico Delgado, donde la ONG ya hizo varias denuncias por narcotráfico. Comprende todas las denuncias sólo donde La Alameda trabaja con los vecinos, como aclaró su titular, y candidato a diputado por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Gustavo Vera, admitiendo que esta denuncia "es apenas la punta del iceberg". Según el informe hay, al menos, diez puntos de venta en Liniers, nueve en Recoleta, dieciocho en Caballito, once en Balvanera, doce en Almagro... El informe fue elaborado con información de los propios vecinos. Recordemos que La Alameda denunció más de 600 prostíbulos ilegales y a muchos talleres clandestinos con mano de obra, en algunos casos, semi-esclava.  


Muchos de los puntos de venta de droga de la ciudad están cerca de las escuelas o actúan en la vía pública con pequeñas cantidades que traen de algún aguantadero, prostíbulo o boliche para, si los agarran, hacerlas pasar por tenencia personal. Además, mucha de la mano de obra que emplean estas organizaciones son chicos, que ante el fracaso escolar, la precarización laboral y la falta de oportunidades son reclutados por estos auténticos mercaderes de la muerte. Cuando caen en el flagelo de la droga tienen dos opciones; o salen a drogar para conseguir droga o forman parte del circuito. Por lo que para los traficantes, además de ser inimputables por tratarse de menores, son una mano de obra adicta y dependiente. 

La clave es no punir a ese chico como ahora pretenden algunos políticos demagogos en campaña, sino es seguirlo hasta el aguantadero, donde está la droga. Muchos prostíbulos, habilitados como cabarets o wiskerías, actúan en el narcotráfico, al igual que en la explotación y en la trata de mujeres. Esta modalidad es muy común en las zonas de Monserrat y Constitución por ejemplo. Muchos pseudo “departamentos privados” donde las mujeres dicen ejercer la prostitución “por cuenta propia”, no sólo son explotadas sino que, además, sirven de aguantaderos de traficantes. 

Como explicó Gustavo Vera, los aguantaderos con una especia de “tomas de las tomas”. Cuando por la crisis económica de 2000-2002 miles de familias sin techo ocuparon en medio de la desesperación casas y edificios abandonados para poder vivir. Pero desde 2004 en adelante, las distintas administraciones de la Ciudad impulsaron los desalojos masivos, que no significaron en muchos casos la sustitución a los dueños legales de las propiedades, sino que fueron “tomas de tomas” de bandas que responden a los comisarios, jefes de brigada y hasta algunos jueces y fiscales, que se dedican a armar el aguantadero. 

El jefe de Narcóticos de la Fuerza del Gallito es un hombre de estrecha relación con el Juez Federal favorito del poder (el que siempre sale “sorteado”) salpicado por una cantidad enorme de causas. Como decíamos hace unas semanas, cada ver que se investiga sobre, no sólo, narcotráfico, sino también prostitución y trata de personas, talleres clandestinos y explotación de mano de obra esclavizada, las bandas de “trapitos”, las barras bravas, los “pungas” organizados, etc., siempre “salta el botón”.  Casi todos los delitos tienen que ver con alguna presencia corrupta por part del Estado, y no sólo de las fuerzas policiales.

 Y no es sólo el circuito de la cocaína de mala calidad y el paco, sino que hay todo un circuito del éxtasis y las pastillas de diseño alrededor de las fiestas electrónicas que cualquier chico habitué conoce, aunque no necesariamente consuma, porque se hace sin ningún tipo de ocultamiento. Casi cualquier chico que va a las fiestas electrónicas no sólo sabe que se venden drogas, sino que hasta te puede señalar dónde y quién. Según la ONU la Argentina ya es el tercer exportador mundial de droga y el primer consumidor de Latinoamérica.  

En el más bajo nivel, los chicos necesitan entre $20 y $30 por día, pero cuando hablamos de las pastillas de diseño debemos multiplicar, al menos, por diez. Es que junto al narcotráfico ha crecido el lavado de dinero. En el 2011 el GAFI estuvo a punto de expulsar a la Argentina  porque de las 23 condiciones que pactaron los 160 países que lo componen para combatir el lavado de dinero la Argentina no cumplía con 21. Fue cuando se apuraron y usaron esa excusa para aprobar la represiva Ley “Antiterrorista” que, en realidad, lejos de preseguir a las mafias, lo que hace es ilegalizar la protesta social, haciendo una especie de “como sí” para quedar bien ante el exterior, pero en eralidad fue una ley de represión interna. 

El crecimiento del lavado de dinero de la mano del crecimiento del narcotráfico ha constituido un auténtico proceso de acumulación privilegiado de capital mafioso que se recrea en este “capitalismo de amigos” alrededor de las conseciones de obras públicas por contratación directa o con licitaciones “a medida” que después hace que haya gente que se hace multimillonaria de un día al otro sin hacer mérito o esfuerzo alguno. 

Muchisimos de los puntos de venta que denunció La Alameda están en los alrededores de las escuelas secundarias. Los chicos y las familias lo saben, pero tienen mucho miedo ante la impunidad total con que actúan las bandas mafiosas. Hay una inacción notable no sólo de la policía sino también de la Justicia, los organismos oficiales de lucha contra el narcotráfico y de los gobiernos tanto de la Ciudad como Nacional. No sólo falta voluntad política sino que hay una colusión con la mafia que ha atravesado casi todos los estamentos del aparato del Estado.

¿Cuántas denuncias concretas han presentado ambos gobiernos? Ninguna, puntualizó el titular de La Alameda. Es más, gran parte de la política se está financiando con el trabajo esclavo, con la prostitución y con el narcotráfico. 

Es verdad, hay muchas causas con denuncias, con investigaciones y hasta causas abiertas que hay que apoyar e impulsar, pero hay una parte del crimen organizado que financia la política que no se toca. Este proceso de capitalismo de amigos (legales e ilegales) no sólo degeneró las estructuras políticas y económicas del país, sino también ah provocado una crisis de valores que hacen pensar en Estados nacionales que fueron cooptados por las mafias como Colombia y México, donde mueren 30.000 personas al año por culpa de la violencia relacionada con el narcotráfico. Allí hacen el duelo que hacemos por los crímenes de lesa humanidad de la última dictadura cívic-militar todos los años. 

Acá ya hay un barrio literalmente “tomado” por las mafias que en 5 años tuvo 500 muertos como denunció el cura Adolfo en una causa judicial. Pero no sólo los gobiernos de la Ciudad y Nacional no dicen nada, sino que tampoco los medios (ni los “militantes” ni los “corporativos”).  

A diferencia de México donde las mafias instalaron una especie de estado paralelo al Estado nacional que se relacionan a veces en forma corrupta y a veces se enfrentan por la soberanía territorial, acá el Estado y la mafia se mezclan. Pero no sólo el Estado está colusionado con las mafias, sino que la sociedad cuando no está inerte, también participa en distintos “grados de ilegalidad” como mano de obra directa o indirecta de las mafias.  Fronteras que no funcionan, radares que no funcionan, descontrol en lo que viaja en los aviones o en los barcos. 

Más allá de lo que votemos el 27, pensar que esto va a cambiar el 29 está equivocado. Esto requiere que toda la ciudadanía se comprometa a dejar este país mejor de lo que ahora tenemos. Significa organizarse en los trabajos y en los barrios para luchar contra el capitalismo mafioso que no sólo prepara un nuevo ajuste más o menos decenal para “reiniciar” este “modelo” económico de explotación, dependencia y desigualdad crónica, sino que, además, hace que combate al crimen organizado con anuncios demagógicos y saturando las calles con las fuerzas del gatillo fácil y el espionaje interno para joder a los que “portan cara”, al tiempo que desde los medios bombardean a la opinión púbica(da) con el mensaje de “son ellos o nosotros” en una auténtica guerra de pobres contra más pobres.




© carlitosber.blogspot.com.ar, Octubre 12 MMXIII
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