Semana 28

Empezó la campaña

El 11 de agosto se celebrarán las segundas elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias; las PASO, el mecanismo con el que el peronchismo convirtió oficialmente las elecciones nacionales en una gran interna abierta entre todas sus vertientes y divisiones. La idea original de La Jefa era obligar a todos a adecuarse a un sistema bipartidista entre "el progresismo" y "la derecha" -algo así como el eterno combate entre demócratas y republicanos en U.S.A.-, pero la dinámica perversa del peronchismo no lo permitió; un fenómeno que se convirtió en una fuente de trabajo a través de la administración de la decadencia del Estado y sus fructíferos derivados. La góndola ofrece las ofertas de siempre, con algunos reacomodamientos y múltiples jugadas cuyo horizonte está más puesto en octubre de 2015 que en octubre de este año.

Los Ladriprogresistas son los que ponen más en juego sin lugar a dudas. El movimiento Nac&Pop han llegado su límite legal, estructural y hasta etario para continuar sin un cambio importante en las caripelas y ni que hablar de un replanteo del "modelo" -que nunca existió- que ya empezó a acumular tantas contradicciones e inconsistencias que van camino a convertirlo en otra trampa sin salida, como lo fue la convertbilidad -sí, dije una mala palabra- después de la Crisis del Tequila de 1995.

El problema son los incompetentes que están donde están por esa casualidad que los obliga a la obsecuencia y la genuflexión permanente, que tanto halagan a los administradores del Poder -que cuando lo detentan, olvidan que es temporal-. Estos aduladores buenos para nada son la columna vertebral del conservadurismo ultra Nac&Pop; saben que cualquier alternancia, incluso dentro del propio Ladriprogresismo, no sólo pone en juego su supervivencia en esta forma de vida que es la decadencia del Estado y sus fructíferos frutos, sino su libertad ante la epidemia de la transparencia que acontece sobre la opinión pública(da) cada vez que la Crisis Decenal amenaza.

Son ellos los animadores de la fiebre por la Reforma Constitucional a la que disfrazan de buenas -y hasta necesarias- intenciones; pero que, como sucedió en 1994, no tiene otro objeto que asegurar la continuidad del poder de La Jefa -tentada, aunque ella diga lo contrario, como cualquier mortal de continuar al frente de la tribu hasta poder heredarlo en alguien a quien considere su legítimo sucesor-. Los inquieta que justamente su líder, parece admitir que es un "pato rengo", y que sus cabezas están en bandeja de plata a disposición de quién pueda apoderarse del movimiento.

Y surgen los primeros dos candidatos a suceder a La Jefa desde adentro del Ladriprogresismo; doblándolo un poco, pero sin quebrarlo. El primero, es El Carilindo Mini-Gobernador de Tigre y su Liga Alumbrado, Barrido y Limpieza: quieren desde el poder -territotial, social y mediático- que da el conurbado bonaerense seguir siendo los socios principales -y preferenciales- del "modelo" que nunca existió, tal como generó el Cabezón de Lomas de Zamora -ex Piloto de Tormentas (Generadas) y como Él exacerbó a partir de 2005, cuando se convirtió en el campeón exclusivo del peronchismo, luego de un (¿)fallido(?) intento de armar un movimiento "nuevo", distinto del movimiento que Don Juan Domingo inauguró -que, al día de hoy, algunos ilusos gorilas pseudo progresistas entristas y frepasistas tardíos pretenden estar adhiriendo, pero que, al igual que el "modelo", nunca existió-.

El Carilindo de Tigre sabe que la hora de demostrar su territorialidad y su chapa para la presidencial es hoy. Arriesga todo poniendo los pies "fuera del plato", igual que hizo Él entre 2003 y 2005, cuando una elección ganada a medias lo obligó a armar el mito urbano de la transversalidad -que como el otro mito urbano del 3G, funcionó sólo de a ratos-. El Carilindo de Tigre por eso coquetea con la clase media opositora -a la que el impuesto a las ganancias la está agujereando mal-, con la Cadena Ilegal Nacional del Desánimo, un cheque siempre al portador que el Ladriprogresismo transformó en una ex efurecida con un proceso de divorcio convertido en una auténtica guerra de aniquilación mutua -única cosa "buena" que puede salir de este combate mortal-. Como logró hacer la Alianza con el Chacho Posmoderno Televisivo que covenció a los Radichetas que la clave de 1999 era continuidad de la convertibilidad -volví a decir la mala palabra-, pero sin la corrupción y la fiesta riojanista, catorce años después El Carilindo de Tigre hoy promete la continuidad del "modelo" pero sin el lavado y la arrogancia ultra K. Y tiene con él el poder territorial y social que le da su Liga ABL, los mini gobernadores como él comparten el control -inestable- de auténticos ejércitos de pobres -que significan no sólo votos, sino poder de movilización social, no movilidad-; y comparten su cualidad de ser casi eternos, lo que le dan cierta independencia del Gobierno Central de turno. 

El desafío del Mini-Gobernador y su Liga ABL es un desafío sobre todo al Gobernador Todo Positivo Siempre Para Adelante y su estrategia Zen para saltar del Sillón de Rocha al de Rivadavia. Gobernador de la provincia inviable y dependiente del poder Central, se dio cuenta de que su cubierta extra de teflón mediático no basta y decidió enfrentar al Carilindo de Tigre, y convertir la legislativa en una interna presidencial del pos-Ladriprogresismo; dejó de lado la estrategia Zen y pero no se convirtió en un simple soldado del movimiento Nac&Pop, sino que en su mariscal de campo, a las órdenes sólo de La Jefa. En una genial maniobra, obligó a todos los aduladores buenos para nada -que hasta hace una semana lo querían echar de La Plata- a encolumnarse detrás suyo. Sabe que si La Jefa no llega al magic number para modificar la Constitución inmediatamente después de octubre, va a tener que elegir su sucesor entre lo que hay, y no entre lo que ella quisiera. Y ella sabe, más que nadie, que la única opción es el Gobernador de Teflón; al que ella tanto aborrece, pero que como Rusia contra Napoleón le permitió adentrarse en terreno enemigo yermo esperando que actuara el General Invierno.

En la "opo" tenemos dos alianzas posibles e -inevitables-: unos ya se dieron cuenta de que no les queda otra que juntarse para no enquistarse en minorías irrelevantes y otros todavía no se avivaron -o se niegan a hacer algo, que en el fondo, no quieren-. Por un lado están los Soja Socialistas Santafesinos, los Radichetas y personajes que son su propio partido -como la Gorda del Crucifijo, líder indiscutida de la epidemia de la transparencia; el ex Cineasta Idealista, último sententista auténtico; la Turgente y La Turgente Vicky, favorita del voto baboso; entre otros-: salieron a disputarle el voto progre de clase media y de los universitarios, que es antiperonchista por naturaleza. El problema es cómo podrán convertirse en una alianza más coherente y sustentable que los mismos radichetas formaron con el Chacho Posmoderno y su frepasismo -hoy, la mayoría de estos últimos, dentro del Ladriprogresismo-. Esa es su principal debilidad, todos les endilgan a los radichetas el fiasco de esa Alianza modelo 99 por el fracaso del Inimputable Fernandito; y la chicana favorita de los ladriprogresistas para anular toda posibilidad de debate. Nobleza obliga, son los únicos que afrontan las P.A.S.O. como la ley lo establece en  el Artificio de Ciudad Autónoma donde presentaron cuatro listas -porque saben ahí van a ganar-. En la Inviable Provincia de Buenos Aires, van con una lista única, pero ante cuatro listas únicas del peronchismo: las dos del Ladriprogresismo, las dos del Peronchismo Anti K.

Esos últimos son los que van camino a formar una segunda alianza, si quieren llegar con posibilidades a octubre de 2015 se van a tener que juntar. De seguro serán los grandes perdedores de este turno electoral. Gallinero lleno de gallos, su problema es que necesitan un líder nacional. Tienen al Pastor Televisivo Alika Alikate, que está desesperado por serlo, pero si se queda afuera, ante lo que parece un combate mortal entre las dos listas Ladriprogresistas, deberá replantearse su futuro; al Camionero Hugote, que sueña con ser el Lula del Río de La Plata, pero que sabe que la única elección que gana es la del Sindicato de Camioneros, porque está arreglada y su patota la controla; y el gallego Cordobés, el señor feudal del Interior que, como su provincia se lo permite, decidió plantarse ante La Jefa. Pero con ninguno de éstos podrían ganar, sus dos candidatos están afuera: les gusta el Carilindo Mini-Gobernador de Tigre, que significaría una vuelta al calorcito del Poder Central, pero al que -como toda la sociedad- todavía están evaluando si se jugará con su Liga ABL a ir por todo, o si es una trampa Nac&Pop. El otro no les gusta, es El Niño Cincuentón, líder del macriputismo -un gupúsculo de neoconservadores y gente bien con buenas intenciones que se oponen, pero no mucho-, alcalde del Artificio de Ciudad Autónoma -que gracias a una cubierta de teflón (mediática) y a la incompetencia absoluta de sus predecesores, acumula méritos a pesar de su no gestión-, y socio a través de su familia con los grandes negociados de la Obra Pública con licitaciones a medida, sobreprecios y blanqueo. El problema es que El Niño Cincuentón se da cuenta -o no quiere reconocer- que es peronchista, y los peronchistas tampoco.

El primer batacazo de la campaña

El Ladriprogresismo es una máquina de crear ex despechadas. La obsesión -hasta la obcecación- con la guerra errónea desatada contra la Cadena Nacional Ilegal del Desánimo -que ni La Jefa misma declaró, sino que fue Él, cuando dejó de ser el presidente, ya que hasta el último día que tuvo la banda mantuvo a La Corpo, un cheque siempre al portador, feliz y contento- terminó enfrascando al Gobierno Nac&Pop en una absurda "guerra santa" contra la Justicia -consecuencia de la derrota anunciada de la anterior-. Con los mini gobernadores de la Liga ABL y los señores feudales del Interior, los jueces comparten su relativa independencia del Poder Central de turno, que les da poder permanecer en sus puestos más tiempo. Por eso la Justicia es débil con el fuerte, y fuerte con el débil. Comprenden que un Gobierno que empieza a mostrar la imposibilidad de continuarse como más quisieran y hasta que empieza a dividirse en una interna presidencial de dos años de duración, no puede no sólo mandonearlos así como así -eso podían hacerlo entre 2005 y 2011-, sino mucho menos meterse con la "santa familia judicial".

Justo el día que oficialmente empezaba la campaña, un juez ordenó la detención y captura del Travieso Jaimito, el secretario de Transportes mano larga -uno de los muchachos de la la Cueva de Alí Babá de las licitaciones a medida, los contratos directos a empresas propias, los sobreprecios, y el blanqueo de coimas en que se convirtió el Ministerio de Planificación de El Cajero Don Julio-. Como Caníval F en los 90, el Travieso Jaimito se mantiene prófugo de la Justicia esperando que la Cámara de Apelaciones lo exima de la prisión preventiva. 

Sucede que el sesgo de la campaña Nac&Pop tampoco ayuda. La Jefa, con terquedades y obsesiones, alimenta la agenda de la oposición y la irritación de sectores de la sociedad a los cuales nadie consigue todavía cautivar. La insistencia con la reforma judicial es un error que se torna incomprensible. Confiesa que le “corrió frío” cuando se enteró de que un desertor de la CIA reveló que entre tantos países espiados por el Imperio estaba la Argentina pero negó descaradamente en la misma frase el espionaje que prohija su poder aunque la misma Justicia lo confirmó. Pero permanece indiferente y tranquila ante una epidemia de transparencia que se extiende, con el Travieso Jaimito prófugo, la "opo" regodea en campaña con ese bochorno. 

© carlitosber.blogspot.com.ar, Julio 14 MMXIII
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